ENTREVISTA
Stany Coppet, el malvado Khaled de ‘El Príncipe’ nos cuenta todos sus secretos…
Nacieste en París, aunque tus orígenes se remontan a la Guayana francesa…
Sí, mi padre, que es de raza negra, es de allí, y mi madre, que es blanca, aunque tiene mezcla de gitana y celta en sus orígenes, es de Bretaña. Mi padre es funcionario del gobierno francés y mi madre trabaja para una compañía aérea, lo que me dio la oportunidad de pequeño de viajar por muchos sitios e influyó muy positivamente en mi educación.
¿Has tenido una vida muy nómada?
Viví en París durante trece años y luego nos mudamos a Guayana francesa, en Cayenne. Luego, fui a la Universidad y estudié Business, entre Francia y Cardiff, en el Reino Unido. Posteriormente me fui a Estados Unidos a buscarme la vida como actor.
¿Qué te motivó a hacer un cambio de profesión tan radical?
Es algo que quería ser desde muy joven, aunque mi primer sueño fue ser tenista. Parece ser que tenía mucho talento de niño, pero cuando llegué a los 15 años no me había introducido en el circuito internacional, por lo que estaba claro que no iba a ser un campeón. Por ese motivo elegí una profesión más segura como Business, para que mis padres se quedaran tranquilos, aunque yo sabía en el fondo de mi corazón que quería dedicarme a algo más artístico. Me costó bastante tiempo asimilarlo y tomar la decisión.
¿Cómo se lo tomaron tus padres cuando les dijiste que querías ser actor?
Había terminado mis estudios y trabajado tres años como periodista. Como era un adulto no tenían otra opción que aceptarlo. Me apoyaron desde el principio y ahora están muy contentos, pero tenían miedo de que no me fuera bien.
Stany Coppet estaría encantado de quedarse en España y seguir trabajando aquí una vez termine ‘El Príncipe’.
Stany Coppet tiene ya un nuevo proyecto para el que cuenta con un preparador físico para ponerle en forma. De momento, el actor parisino no ha querido desvelar de qué se trata este trabajo.
¿Dónde estudiaste Interpretación?
Primero en París, en la época en la que era presentador y reportero de televisión. En esa época conocí a tres personas que fueron clave para que yo decidiera arriesgarme. El primero fue Pedro Almodóvar, a quien encontré por casualidad en una tienda de discos en París, cuando fue a recoger el César por ‘Todo sobre mi madre’. No creo que se acuerde. Me acerqué y le hablé de mi sueño de ser actor y me animó a estudiar. El segundo fue el director estadounidense Spike Lee, que incluso me ayudó a conseguir el acceso al Instituto Lee Strasberg de Nueva York para estudiar Arte Dramático. Y la tercera fue la directora francesa Euzhan Palcy, que dirigió a Marlon Brando en ‘Una árida estación blanca’.
¿Cómo fue tu vida en Nueva York?
Fue un proceso duro, pero tenía que experimentarlo para saber que era lo que yo verdaderamente quería hacer. Tenía dinero para quedarme tres meses, pero quería que fuera más tiempo. Al final estuve tres años allí y uno en Los Ángeles. Tuve que trabajar de camarero y cuando conseguí tener una red mayor de contactos me convertí en promotor de fiestas, en bares y discotecas. También fui profesor de tenis. Al final, me fui a Los Ángeles, porque quería experimentar cómo era el epicentro del cine mundial. Tuve que vivir en una caravana durante ocho meses. No tenía baño y me tenía que duchar en el gimnasio. Además, había por allí toxicómanos que incluso intentaron meterse en la caravana. Tuve claro que si había sido capaz de aguantar tanto es que esa era mi verdadera vocación.
Stany es muy feliz con su mujer, Dolores Chaplin, con quien, de momento, no tiene planes de boda.
¿Pensaste en tirar la toalla alguna vez?
Fueron momentos difíciles. Mis padres creían que estaba bien en Estados Unidos, comiendo bien, bajo un techo… cuando en realidad llegué a pasar hambre, tuve problemas con la policía… por dormir en la caravana en la calle, ya que no es legal. En una ocasión me detuvieron por conducir un coche muy viejo por Beverly Hills, donde estaba buscando una pista de tenis. Unos policías de paisano les parecí sospechoso, me pusieron las esposas y me estuvieron interrogando durante una hora porque ni se creían que era francés por mi aspecto.
En Francia has hecho algunos papeles en cine y televisión…
Sí, en distintas series, una de ellas Clem, donde rodé un capítulo con Victoria Abril, la protagonista. Es una actriz que me encanta, tiene mucho corazón y llena de vida.
Tu gran oportunidad, sin embargo, te llegó en España, con ‘Águila Roja, la película’…
Fue una gran sorpresa. Me llamó mi representante en Francia diciéndome que querían verme en España sin hacer si quiera el casting. En la entrevista en Globomedia, me dijeron que el personaje era mío.
A raíz de este trabajo te surgió el papel de ‘El príncipe’.
Creía que no me lo iban a dar. Al mismo tiempo estaba preparando una película que se rodaría en la Guayana francesa, que me exigió adelgazar 17 kilos, me dejé una barba enorme. Fui a la entrevista con este look y parece que les gusté. Dos meses más tarde me llamaron para decirme que me querían para el papel. Ha sido un regalo para mí porque el proyecto es fabuloso.
¿En qué punto de tu vida apareció tu pareja, Dolores Chaplin?
Hace cinco años que vivimos juntos. Nos conocimos en el rodaje de un cortometraje. Gracias a este trabajo encontré el amor de mi vida. Estoy en el mejor momento de nuestra vida.
Stany Coppet, en el restaurante Sexto de Madrid, donde realizamos esta entrevista.
¿Se habla mucho de Charles Chaplin, el abuelo de tu mujer, en tu casa?
Cada año nos reunimos en Navidad en Suiza, donde viven los padres de mi mujer. A veces tenemos cenas familiares. Suele venir a estas fiestas Geraldine Chaplin, tía de mi pareja.
¿Cómo es tu hijo Akiles, que ya tiene diez meses?
Es una maravilla. Ya me lo imaginaba, pero es aún mucho mejor. Tengo muchas ganas de jugar al tenis con él y que me cuente qué hace en la escuela, pero poco a poco. Me duele mucho no estar con él por la noche. Anoche dormí con mi hijo y me recargó las baterías. Tengo ganas de verle de nuevo.
¿Te vas a casar con Dolores?
No estamos casados. El bébe es para toda la vida, no se puede romper. Es el lazo más fuerte que puede haber, más que el matrimonio. No creo en él, porque mis padres se separaron. No sé si ella quiere casarse, veremos…
En ‘El príncipe’ interpretas al malo…
En la primera temporada fue creciendo poco a poco, hasta que nos enteramos que es el malo malísimo. Estaremos rodando la segunda temporada hasta finales de febrero. El papel es mucho más amplio ahora.
¿Cómo es tu relación con José Coronado?
Es el dueño, nos enseña a todos su experiencia. Tiene una relación más estrecha con Álex González porque tiene casi todas las secuencias las ruedan juntos. Nos da muchos consejos y nos ayuda gracias a su experiencia. Es una relación de igual a igual, lo que es de agradecer. Es muy humano y muy simpático.
Álex es tu rival en la serie…
Tenemos que mantener una tensión entre nosotros para que luego sea creíble en la pantalla. Nos ponemos en esa tesitura de rivales unos 30 segundos antes de comenzar a grabar. El resto del tiempo nos reímos mucho, compartimos bromas… Quiere trabajar en Hollywood, pero dice que tiene que mejorar el inglés, así que muchas veces hablamos en este idioma.
El actor, con Hiba Abouk, quien interpreta a Fátima, su mujer en la serie.
¿Cómo es Hiba Abouk?
Es muy cariñosa. Me ha enseñado muchas cosas de Madrid. A veces salimos a cenar y hablamos del trabajo, pero también sobre nuestras vidas. Me pregunta por Akiles, mi hijo, mi pareja. A veces me da consejos de cómo trabajar en España porque ella lleva aquí ya bastante tiempo.
¿Y Rubén Cortada?
Es uno de los compañeros con quien tengo más relación. Hablamos de todas nuestras cosas, privadas o no. Nos reímos mucho en el plató. A veces no podíamos grabar de todo lo que nos estábamos riendo. Es muy simpático y humano. Me encanta jugar al tenis con él, aunque ahora tiene un nivel más alto que yo. Los dos somos extranjeros y ambos venidos del Caribe, así que tenemos muchas cosas en común.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
!Gracias!,por su comentario.